Una de las características más solicitadas y de moda en el entorno del calzado laboral es la propiedad ESD ¿pero sabes qué es y si realmente la necesitas para tu puesto de trabajo?
La normativa UNE-EN ISO 20344:2012 viene a regular las características generales para la homologación o certificación de los calzados de uso profesional en términos de seguridad, ergonomía, inocuidad, confort o protección frente a posibles caídas por resbalamiento.
Además de estos riesgos mecánicos, térmicos o químicos, la legislación respecto a los calzados de seguridad se refiere a los riesgos eléctricos, que será en los que nos centraremos.
En este post te explicamos que es la conductividad eléctrica, la principal característica que mide el ESD (Electrostatic Discharge), también conocido en español como Descarga Electrostática.
Por otro lado, veremos qué tipos de calzado existen según esta conductividad eléctrica y finalmente otros factores clave a tener en cuenta para ayudarte a escoger el modelo de calzado idóneo para la clase de trabajo que desarrollas.
Conductividad y resistividad eléctrica
La conductividad es la propiedad que tienen algunos objetos de transportar calor o electricidad. Se trata de una propiedad física que permite a algunos cuerpos la conducción de carga eléctrica a través de ellos. En el caso de elementos sólidos, como el cuerpo humano, es la estructura atómica la que determina la conductividad o más bien la resistividad.
La resistividad es la característica que describe el comportamiento de los materiales frente al paso de la corriente eléctrica. Es la capacidad de un material a evitar el paso de la electricidad a través suyo y se mide en ohmios. De tal manera que un material que tenga un valor alto de resistividad será considerado como un aislante, mientras que aquellos componentes con un bajo valor serán conductores.
Tipos de calzado según su resistividad eléctrica
Para minimizar los riesgos que pueden provocar algunas de las propiedades de la electricidad estática resulta fundamental conocer las distintas tipologías de calzado existentes en el mercado y así encontrar el que mejor resuelva nuestras necesidades profesionales.
Por un lado, la normativa UNE-EN ISO 20344:2012 rige las características generales para el calzado, entre otras las propiedades conductoras, y nos clasifica el calzado en: conductor, antiestático y aislante (dieléctrico).
Por otro lado, la normativa UNE-EN IEC 61340-4-5 y UNE-EN IEC 61340-4-3 definen los requisitos para considerar un calzado ESD.
Gráficamente se podrían representar los distintos tipos de calzados en un eje de coordenadas, con los Ohm. Los zapatos conductores tienen menor resistencia eléctrica, mientras que los zapatos aislantes/dieléctricos son los que mayor resistencia ofrecen y por lo tanto no dejan pasar la electricidad a través del cuerpo.
En medio de la gráfica tendríamos los zapatos antiestáticos, y dentro de ellos, el rango óptimo de ESD.
Calzado conductor:
El calzado conductor es un tipo de calzado de trabajo que tiene un nivel de resistencia eléctrica muy bajo, de manera que cualquier corriente pasa a través de él sin ningún impedimento. No es un calzado muy común.
Calzado antiestático:
Es aquel que evita la generación de electricidad estática, al presentar una resistencia eléctrica baja, lo sufrientemente para permitir que las cargas electroestáticas se disipen reduciendo la posibilidad de que salten chispas, evitando así, posibles explosiones, incendios y otros accidentes relacionados.
A pesar de que el calzado antiestático protege también de los choques derivados por irregularidades en los aparatos eléctricos con tensiones de hasta 250 V, no es un calzado especializado en trabajos de electricidad.
Son los más comunes en el mercado, cumplen con las propiedades antiestáticas definidas en las normas EN20345:2012 (en el caso de que lleve puntera) o EN20347:2013 (si no lleva puntera). Son considerados EPI de categoría II.
Calzado dieléctrico:
Se trata de un calzado aislante que presenta una gran resistencia a la electricidad, para evitar que la corriente pueda conducirse a través del usuario. Se podría decir que todo el calzado dieléctrico es aislante, pero no todo el calzado aislante es dieléctrico. Este tipo de calzado se fabrica con caucho y otros materiales poliméricos (tipo bota de agua).
Este tipo de calzado de seguridad, deberá estar certificado bajo la norma específica UNE-EN 50321 y protege al profesional de un riesgo de muerte, por lo que es considerado como EPI de categoría III.
Este calzado dieléctrico/aislante es ideal para electricistas o trabajadores con riesgo de contacto con la electricidad.
Calzado ESD (Electro Static Discharge):
El calzado ESD, en castellano calzado de descarga electroestática, combate también la generación de electricidad estática, pero con un rango de resistencias muy específico. Todo el calzado ESD se considera antiestático, pero no viceversa.
Como el nivel de disipación de las cargas electroestáticas es muy alto debido a su gran capacidad conductora, se evita la acumulación de energía electrostática consiguiendo sacar al exterior dichas cargas.
El calzado ESD incorporan un icono identificativo de color amarillo y negro.
Hoy en día, muchos de los modelos del mercado incluyen esta característica. Si además de protegerte frente a las descargas eléctricas quieres contribuir a un mejor planeta te presentamos la revolución: Vita Eco S3 ESD
Riesgos para la salud derivados de la conductividad eléctrica
A la hora de identificar algunos de los riesgos a los que se exponen los trabajadores en el entorno laboral relacionados con la electricidad lo más habitual es pensar en calambres, descargas o electrocución, que se producen cuando notamos que la electricidad pasa a través de nuestro cuerpo.
Hay que ser consciente de otros daños colaterales que pueden poner en peligro a los profesionales como son las quemaduras, derivadas de incendios o cortocircuitos.
Finalmente, las chispas provocadas por la acumulación de electricidad estática pueden derivar en explosiones de mayor o menor alcance, especialmente peligrosas en aquellos casos donde exista una atmósfera potencialmente explosiva (ATEX). Este es el mayor riesgo que podemos encontrar y al que deben dar solución los equipos de protección individual.
¿Cuándo es necesario el ESD?
Como acabamos de ver, el único caso con peligro real para el ser humano se da cuando nos encontrarnos es una atmósfera ATEX donde una chispa puede provocar una explosión con graves consecuencias. En este caso es recomendable elegir un calzado ESD para facilitar la descarga a tierra y reducir la posibilidad de chispas.
Sin embargo, si no nos encontramos en una atmósfera ATEX, lo cual es bastante atípico en muchos sectores, y por otro lado no hay peligro directo para las personas, te preguntarás ¿por qué elegir un calzado ESD?
Pues bien, existe un caso donde las descargas electrostáticas pueden ser peligrosas, no para el usuario sino para el material con el que se está trabajando.
Se trata de las empresas de fabricación de la industria electrónica, puesto que una descarga incontrolada puede dar lugar a la destrucción de ensamblajes electrónicos (componentes semiconductores) o provocar defectos ocultos, que pueden generar altos costos en términos de:
- Devoluciones
- Reclamaciones
- Costos de reparación y reemplazo
- Pérdida de reputación
- Pérdida de clientes
Para evitar este problema, este tipo de componentes en riesgo de descarga electrostática denominados ESDS (dispositivos sensibles a descargas electrostáticas) se marcan con el siguiente símbolo.
Evidentemente será obligatoria la característica ESD, no sólo en calzado sino en cualquier otro elemento del entorno (suelo, muebles, herramientas, vestuario, etc)
El suelo ESD y otros EPI ESD para una protección eficaz
Cuando hablamos de Zonas EPA ESD donde se necesita cumplir con unos parámetros de descarga determinados es necesario que el suelo, muebles, así como el resto del equipo de protección del trabajador (guantes, calcetines, ropa…) sean catalogados como de descarga electroestática, o lo que es lo mismo ESD.
El calzado por sí solo no basta para ofrecer protección, ya que precisa de un suelo adecuado. De lo contrario no se conseguirá la mejor protección. Existe un amplio catálogo de suelos ESD que no solo protegerán a los empleados sino también a los equipos, evitando la acumulación de energía estática. Los suelos y revestimientos ESD más exigentes están fabricados con losetas de caucho, de goma, vinilo o nitrilo. También existen pinturas especiales que convierten a cualquier suelo en conductor.
Respecto al vestuario ESD la oferta es también muy variada: guantes, camisas, camisetas, calcetines, pantalones o batas… en la actualidad hay una gran propuesta con diseños de todo tipo para lograr la mejor protección. Encuentra el tipo de prenda que necesitas en nuestro catálogo industrial.
Entornos de trabajo para cada tipo de calzado
Como hemos visto en este post, el calzado ESD es clave en aquellos entornos de trabajo donde la electricidad estática puede causar desperfectos en la fabricación de circuitos electrónicos o causar una explosión grave en un entorno ATEX. Por ejemplo:
- Trabajos con circuitos impresos.
- Salas blancas de laboratorios farmacéuticos.
- Cabinas pintura con alta concentración.
- Químicas, refinerías, fábricas de munición.
- Otras labores con peligro por salto de chispa.
Principalmente, son muy populares en la industria electrónica, donde se trabaja con placas, circuitos y otros componentes. Con modelos S1P ESD y/o S3 ESD para entornos más industriales con mayor riesgo y S2 ESD de color blanco y sin puntera antiperforación para salas blancas o industria alimentaria.
Otros sectores que demandan calzados de seguridad ESD son las fábricas de automoción, electrodomésticos y aeronáuticas. En general son los zapatos recomendados para trabajos que requieran el cumplimiento de la normativa CE EN ISO 60341-5-1.
Los calzados antiestáticos son los más habituales, puesto que incluye todo el calzado de seguridad (con puntera) y de trabajo (sin puntera) salvo los de categoría SB y OB. Este calzado disipa la electricidad estática de manera eficiente y es adecuado para uso general.
Por último, los modelos dieléctricos son utilizados por aquellos operarios que trabajan en entornos con electricidad, con riesgo como descargas de alta tensión. Personal de mantenimiento de instalaciones eléctricas y electricistas, principalmente. Si bien es cierto que la única solución 100% eficaz son las botas de goma (tipo bota de agua), existen otros modelos como el VOLTIO SBP, que ofrecen una protección eficaz (testados frente a alto voltaje por el propio fabricante) al mismo tiempo que un buen grado de confort para el usuario.
184 comentarios
Armando Jacome
Que pasa si uso calzado ESD en temporada de lluvia y relampagos en el exterior de la empresa ?
Armando Jacome
Que pasa si uso calzado ESD en un dia de lluvia y tormentas electricas, cual es eel riesgo ?
Victor Ruiz
Excelente iniciativa, muy buen articulo Josep.